Una mujer hermosa con una mente extraordinaria, una actriz mediocre con piernas arqueadas, una mecanógrafa talentosa que tiene fluidez en varios idiomas, la esposa del director del teatro, una musa, la belleza pura con pelo moreno y labios sensuales… Todo esto y muchas cosas más decían sobre Zinaida Reich, la mujer que amaban el poeta Serguéi Yesenin y el director teatral Vsévolod Meyerhold. La joven se graduó de la Facultad de Historia y Literatura de los Cursos Superiores de Mujeres en Petrogrado. Zinaida siempre estuvo interesada en el movimiento revolucionario, por lo que fácilmente consiguió el puesto de subsecretaria de redacción en el primer periódico socialista-revolucionario legal “Delo Naroda”, donde conoció al poeta Serguéi Yesenin.

El 31 de mayo a las 18 horas os invitamos a participar en la conferencia en línea “Vsévolod Meyerhold, Zinaida Reich, Serguéi Yesenin”, que se llevará a cabo dentro del ciclo de conferencias “La historia de un amor”. La autora y presentadora Anna Silyunas es crítica de teatro, historiadora de arte y directora de la fundación “Casa de Rusia en Barcelona”.

El primer encuentro de Yesenin con Reich tuvo lugar en la primavera de 1917. El poeta se enamoró de Zinaida y le pidió la mano tan solo después de un mes y medio de conocerla. Reich no lo esperaba en absoluto, pero sin pensarlo dos veces, le dió un “sí quiero”. Después de la boda, los jóvenes se quedaron en Petrogrado, en la avenida Liteiniy, y empezaron a vivir una vida familiar tranquila; pero la felicidad les duró poco. El poeta, que empezó a ganar fama rápidamente, se volvió adicto al alcohol y durante unos ataques de celos y pasión, se permitía levantar la mano sobre su esposa. En 1920 la pareja se separó. En aquel tiempo Reich estaba embarazada de su segundo hijo. En 1921 su matrimonio fue anulado oficialmente.

Después de divorciarse de Yesenin, Reich fue admitida al Taller Superior de Teatro, donde conoció a Vsévolod Meyerhold. A pesar de que el director era 20 años mayor que Reich, se enamoró perdidamente de su alumna y dejó a su familia con tres hijos para estar con ella. Se casaron en 1922. Para su amada, Meyerhold no solo cambió el estilo de vida modesto, convirtiendo su casa en un salón de moda y a Zinaida en una verdadera reina y anfitriona, sino que también nombró a su esposa la primera actriz de su teatro, mientras que ni el colectivo ni los los críticos la apreciaban.

El segundo matrimonio de Reich fue ciertamente más exitoso que el primero. ¿Pero le amaba a Vsévolod con la misma intensidad que él la amaba? Poco antes de la muerte de Yesenin, Meyerhold se enteró de las reuniones secretas del poeta con su querida mujer y le pidió a la amiga de Reich no facilitar estos encuentros, porque "si se vuelven a estar juntos, Zinaida será infeliz ...". Las citas se vieron interrumpidas por la trágica muerte del poeta. En el funeral de Yesenin, Reich, en voz alta y en presencia de su marido, exclamó: "¡Adiós, mi cuento de hadas!".