Espero que la salida sea alegre y espero no volver nunca más.
Frida Kahlo
Los destinos de muchos artistas del siglo XX estuvieron estrechamente vinculados con la política. La pintora mexicana Frida Kahlo no fue una excepción, ya que estuvo directamente relacionada con la Rusia soviética. Kahlo mostró interés por el comunismo y las ideas socialistas, simpatizando con ellas en el contexto de la lucha contra el capitalismo y la opresión.
El 29 de octubre a las 18:00 horas os invitamos a la segunda parte de la conferencia en línea ‘Frida Kahlo, Lev Trotsky e Iósif Stalin’, dedicada a las sorprendentes confluencias de los destinos de tres figuras destacadas del siglo XX: la pintora mexicana Frida Kahlo, el revolucionario Lev Trotsky y el líder soviético Iósif Stalin. La conferencia será impartida por el profesor Vidmantas Silyunas, doctor en Historia del Arte, Artista Emérito de la Federación Rusa, jefe del departamento de la Escuela-Estudio del Teatro de Arte de Moscú (MXAT) y caballero de la Orden del Mérito Civil.
La biografía de Frida Kahlo podría inspirar la trama de un thriller. En septiembre de 1925 el autobús en el que viajaba la joven de 17 años, chocó con un tranvía, lo que provocó que la futura pintora sufriera una triple fractura de la columna vertebral, 11 fracturas en una pierna y una grave herida en el abdomen, perforado por una barra de acero. Tras 30 operaciones no muy exitosas, la joven quedó discapacitada de por vida, pero no perdió ni su energía creativa, ni su temperamento apasionado, ni su belleza.
En 1929 Frida se casó con el famoso pintor comunista mexicano Diego Rivera, quien había vivido en Moscú entre 1925 y 1926, y había tenido contacto con Stalin. Sin embargo, Rivera, apasionado y pronto convencido de que Stalin había traicionado los ideales de la revolución, se alineó con Trotsky y ayudó a organizar su traslado a México. Fue allí donde el revolucionario, de 58 años, conoció a la joven Kahlo, de 29, quien lo cautivó desde el primer momento.
Trotsky estaba fascinado con la joven pintora: era ingeniosa, inteligente y hermosa. Se intercambiaban notas, escondiéndolas en libros. "Me has devuelto la juventud y me has quitado la razón. Contigo me siento como un muchacho de diecisiete años", decía una de ellas. A Frida le halagaba la atención del conocido dirigente político; él sabía coquetear, y ella no dudó en participar en el juego que le proponía. Además, era una excelente manera de vengarse de su marido por sus numerosas infidelidades. Sin embargo, esta relación, que se desarrollaba rápidamente, estaba destinada a terminar trágicamente.
El encuentro se realizará en línea, en ruso, con la traducción simultánea al español.
Participación gratuita con inscripción previa.